domingo, 22 de diciembre de 2013

PASEO NAVIDEÑO POR MADRID

Lo que aquí detallamos, no es nada más que lo que hacemos nosotros cada año (aún viviendo en Madrid) y lo que hacen miles de personas aprovechando el puente de la Constitución u otro fin de semana.

Se trata de ver la ciudad con otro color, con otras luces, vestida para recibir al nuevo año, con todos los locales comerciales engalanados para mostrar de la mejor manera sus productos y servicios, esperando a los nuevos visitantes y con todos los madrileños esperando tratar al visitante de la mejor manera posible para que se lleven la mejor de las impresiones de esta nuestra ciudad.

Como indicamos, para nosotros es una tradición que no se ha roto ni cuando las nenas han tenido meses, ni por frío o lluvia. Es una delicia pasear a la caída del sol por las avenidas centrales de Madrid como la Castellana, Paseo del Prado o Recoletos y las perpendiculares a estas (Calle Alcalá o Gran Vía) que nos llevan a lugares tan característicos como son la Puerta del Sol, la Plaza Mayor o la Puerta de Alcalá, y que sean estos lugares nodos de transición a otros puntos de la almendra central que de ningún modo hemos dejar de ver (Mercado de San Miguel, Palacio Real y Jardines de Sabatini, Calle Preciados y aledaños, Calle Serrano, etc.). Lo realmente interesante es pasear por todos estos sitios.

Por dar una idea, nuestro recorrido típico (siempre andando) empieza en la Calle Gran Vía, paseando arriba y abajo, para luego bajar a la Puerta del Sol por cualquiera de las calles que nos pueden llevar a visitar el famoso reloj que nos dará las campanadas el 31 de Diciembre, como son Preciados o Montera. Podréis apreciar la cantidad de personas que pueden llegar a juntarse en estas calles, que se transforman casi literalmente en un río de gente que va calle abajo.

Plaza Mayor
Una vez en la puerta del Sol, una calle que nos gusta mucho como suele estar iluminada es la Calle Arenal, la cual nos hace pasar por delante de San Ginés, para acabar llevándonos a los jardines que hacen de antesala del Palacio Real. Lugar emblemático de anteriores gobiernos y lugar de visita obligada cuando se visita por la mañana (los estudiantes de farmacia de la UCM también la solían visitar por su farmacia, su antigua farmacia). Se ha puesto de moda ver el cambio de guardia, el cual, es verdad que es muy vistoso.

Desde la Puerta del Sol, también  podréis entrar a la Plaza Mayor y comprar en los puestos típicos de la Navidad o simplemente ver cuan bonitos están los balcones iluminados, sean los de la Casa de la Panadería u otros (¡¡en estas casas siguen viviendo vecinos!!). Una de las salidas de la Plaza Mayor nos llevará a contemplar lo bonito que ha quedado el Mercado de San Miguel, punto de interés para gourmets varios.

Una vez vista esta zona, una vez hemos disfrutado de la disparidad de visitantes, comerciantes, vendedores ambulantes, vendedoras de loterías, solemos coger la Calle Sevilla hacia la Plaza de Cibeles, o bien embocamos hacia la Carrera de San Jerónimo para pasar por delante del congreso de los Diputados y llegar hasta la Plaza de Neptuno para girar a la izquierda y llegar igualmente a Cibeles. La iluminación del Hotel que está enfrente del Congreso es espectacular. La foto junto a los leones de la entrada del Congreso con los policías vigilantes es un clásico...

Una vez alcanzamos Cibeles, sin movernos más que lo que se mueve un chulapo bailando un chotis, podremos alcanzar a ver la iluminación del Banco de España, la del el actual Ayuntamiento (antiguo Palacio de Correos) o la de la Casa de América (antiguo Palacio de Linares) que son, sencillamente, espectaculares.

Nosotros solemos subir la calle Alcalá hasta la puerta del mismo nombre, para fotografiarla (no nos cansamos de hacerla fotos) y luego recorrer una calle que tras la remodelación, la han dejado muy, muy bonita. Esta es la calle Serrano, con algunas de las mejores tiendas de Madrid. Pero aunque no se tenga la idea de comprar, recorrerla, pasearla, es un lujo al alcance de cualquiera que se acerque a esta zona y que en pocos lugares van a poder encontrar algo parecido.

La razón de este último recorrido tan personal no es más que para llegar andando hasta la parada de Metro de  Rubén Darío, para volver a casa (el transporte urbano se hace casi necesario para ir al centro) de manera directa. Pero se podría coger la calle Goya y recorrerla hasta cruzar con Príncipe de Vergara o  nuevamente con Alcalá.También se podría ir bordeando el Parque del Retiro desde la Puerta de Alcalá hasta llegar a la Plaza de Carlos V (o como lo conocen todos los madrileños, hasta llegar a Atocha).

Las posibilidades son infinitas. Tantas como calles se van cruzando una y otra vez en nuestro camino elegido de inicio.


¡Disfrutad Madrid!