En el Castañar hay árboles que invitan a hacer múltiples fotografías por las formas que pueden llegar a adoptar sus ramas cuando están sin hojas o las distintas tonalidades de las mismas, según la época. Es un lugar para disfrutar de la variedad de tonos que ofrecen los árboles en Otoño.Y en esta época se puede llegar a recoger castañas (¡¡toma castaña, otra razón más!!). Por cierto, ojo con las castañas que caen, que duelen (¡¡Y esto lo digo con conocimiento de causa!!). En esta época se ven muchas personas con bolsas recogiendo estos frutos. 
Hay que destacar entre todo el bosque un árbol, el más visitado, fotografiado e icono de este singular paraje: El abuelo, un castaño que tiene cientos de años (la edad exacta no la sabemos ni se la hemos preguntado pero los cinco siglos, seguro que los ha cumplido) y que a pesar de haberse llegado a quemar en varias ocasiones (se puede apreciar las "cicatrices"), sigue resistiendo el paso de los años y, sobre todo, de los hombres.
Ojo cuando os acerquéis porque como en otros muchos lugares, hay cupo de entrada, y según la época, os podéis encontrar que a pesar del desplazamiento, no os permitan la entrada por haber cubierto el cupo de coches. Si os pasáis en bicicleta, andando, etc., no encontraréis ningún problema a ninguna hora. Como siempre decimos, por favor, sed respetuosos con el lugar para que todos podamos disfrutar del mismo durante muchos, muchos años.
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